¿Qué hacemos con la deuda?

Para mí, que vengo de estudiar bachillerato de ciencias, no tenía ninguna noción sobre economía, todavía es un mundo inexplorado para mí. Sin embargo el otro día hablamos en clase sobre que pasa cuando un país tiene una deuda y especialmente, ¿quién la solventa, los ricos o los pobres?

Pues bien, cuando un país tiene una deuda, es decir, debe una cierta cantidad de dinero a alguien de manera obligatoria, este debe recurrir principalmente a la política económica. El dinero no vuela por los aires ni sale de debajo de las rocas, por lo que son necesarias una serie de medidas que poco a poco consigan recuperar el dinero que falta. Esto a su vez implica recurrir a una política fiscal, que se basa en los tributos. 

Podemos considerar 2 tipos de tributos. El primero son las tasas, una cantidad de dinero que cada uno debemos pagar para hacer uso de algún servicio público, como por ejemplo, un billete de autobús.

El segundo son los temidos y tenebrosos impuestos, en los que nos vamos a centrar un poco más.

Existen impuestos directos y los principales son el I.R.P.F, o impuesto sobre la renta de las personas físicas. Este impuesto consiste en pagar a la Hacienda una cantidad de dinero adecuada a las ganancias de cada uno de los residentes en España. Esto último implica que los españoles que no vivan en España no deben pagarlo (de ahí la nueva problemática de los influencers que saben eludir este impuesto manteniendo un equilibrio entre residir fuera de España un día más de lo necesario) y que aquellos extranjeros no españoles sí deben pagarlo. Por otro lado, esta el impuesto de sociedades, que recae sobre diferentes personas jurídicas como pueden ser sociedades, asociaciones y también incluye fondos. Recae también en aquellos residentes en España.

Y como impuestos indirectos, el más conocido es el I.V.A, impuesto del valor añadido. Se considera indirecto porque no repercute en los ingresos directamente como lo hacen el resto. Consiste en que un empresario vende u ofrece un servicio y factura el costo del mismo, desvengando el impuesto repercutido. En conclusión, cuando un Estado debe una deuda, su única manera de solventarlo es imponiendo una gran variedad de impuestos sobre la población, y respecto a quien debe pagar esos impuestos, me gustó mucho la explicación que nos dio nuestro profesor y es que cuando el gobierno aumenta los impuestos y escoge la decisión de hacerlos recaer sobre los que tienen más dinero, estos tienen la opción de marcharse a un país donde sea más barato vivir. De esta manera, los ricos los eluden y los pobres tampoco pueden soportar tanto peso económico, por tanto somos los de la clase media los que siempre debemos sufrir el peso de los impuestos. Todo esto se resumen en la famosa frase de       "los impuestos los pagan los que no pueden eludirlos"